En el mundo de la administración moderna, los líderes organizacionales enfrentan un dilema constante: ¿es más importante lograr resultados inmediatos o construir equipos sostenibles y eficientes a largo plazo? En este contexto, Fred Luthans no solo descompone las funciones de un gerente moderno, sino que introduce una distinción reveladora entre dos tipos de gerentes: los exitosos y los eficaces.

Es por eso que hoy aprenderemos:
1. ¿Quién es Fred Luthans?
2. Las cuatro categorías de actividad gerencial
3. Gerentes exitosos vs. gerentes eficaces
4. Reflexiones para los futuros gerentes

1. ¿Quién es Fred Luthans?

Fred Luthans es un reconocido profesor y autor estadounidense, experto en comportamiento organizacional, liderazgo y capital psicológico. Su enfoque ha sido pionero en comprender cómo se comportan realmente los gerentes en su trabajo diario, más allá de las funciones que tradicionalmente se les asignan. Luthans se interesó especialmente en observar empíricamente lo que hacen los gerentes exitosos y eficaces en su día a día, encontrando diferencias que han desafiado los modelos clásicos de la administración.

Desempeño de los gerentes según Fred Luthans

2. Las cuatro categorías de actividad gerencial

A través de observación directa y entrevistas a múltiples gerentes en distintos tipos de organizaciones, Luthans identificó que sus actividades se pueden agrupar en cuatro grandes categorías:

a) Funciones gerenciales clásicas
b) Comunicación
c) Administración de recursos humanos
d) Establecimiento de contactos

Veamos cada una:

a) Funciones gerenciales clásicas

Un gerente debe planear, tomar decisiones, organizar y controlar. Son las más conocidas y forman parte de los fundamentos teóricos de la administración desde Fayol y Taylor.
  • Planificar: Definir metas, estrategias y acciones para alcanzar objetivos.
  • Organizar: Establecer estructuras, asignar recursos y roles.
  • Dirigir: Motivar, liderar y guiar al equipo de trabajo.
  • Controlar: Evaluar resultados y tomar medidas correctivas.
Reflexión: Estas funciones son fundamentales, pero no suficientes. Un buen administrador no solo planea y controla, también sabe comunicar y liderar personas.

b) Comunicación

Un gerente debe ser un comunicador efectivo, tanto dentro del equipo como con otros departamentos y stakeholders. Las actividades incluyen:
  • Compartir información relevante.
  • Escuchar activamente a los colaboradores.
  • Redactar informes y reportes.
  • Hacer presentaciones.
  • Atender correos, reuniones y videollamadas.
Reflexión: Comunicar no es solo hablar. Es escuchar, preguntar con empatía, clarificar dudas, y saber transmitir una visión. Muchos conflictos organizacionales nacen de una mala comunicación.

c) Administración de recursos humanos

Un gerente debe evidenciar su dimensión emocional y social en el trabajo gerencial. Estas son actividades más humanas y sensibles del trabajo gerencial. Incluye:
  • Contratar o ubicar personal.
  • Capacitar y desarrollar competencias.
  • Motivar y mantener el compromiso.
  • Resolver conflictos entre miembros del equipo.
  • Evaluar el desempeño individual y grupal.
Luthans destaca que los gerentes eficaces invierten tiempo y energía en cultivar equipos de alto rendimiento, a diferencia de los gerentes que solo piensan en avanzar políticamente.

Reflexión: En tiempos de automatización y tecnología, lo humano sigue siendo el factor diferencial. Los líderes que valoran a su gente, desarrollan talento y promueven un ambiente justo y colaborativo, construyen organizaciones sostenibles.

d) Establecimiento de contactos

Un gerente debe construir relaciones tanto dentro como fuera de la organización, lo que se denomina networking, esto no es simplemente tener conocidos; es la capacidad de crear y mantener relaciones estratégicas para facilitar la gestión. Incluye:
  • Construir relaciones dentro de la organización (con jefes, colegas, otras áreas).
  • Relacionarse con actores externos (proveedores, clientes clave, autoridades).
  • Representar a la empresa en eventos, ferias, reuniones o medios.
Reflexión: Hacer contactos no es malo. Pero si todo tu enfoque como administrador es quedar bien con los superiores o hacer política interna, puedes perder el rumbo y descuidar a tu equipo. El verdadero líder balancea sus redes con una gestión comprometida y ética.

3. Gerentes exitosos vs. gerentes eficaces

Uno de los hallazgos más poderosos del estudio de Luthans es que no todos los gerentes que ascienden rápidamente son los más eficaces, y viceversa.

✔ Gerentes exitosos:

Son aquellos que suben rápido en la jerarquía organizacional. Dedican:
  • 48% de su tiempo al establecimiento de contactos (networking)
  • 28% a la comunicación
Se enfocan en construir relaciones de poder, visibilidad y alianzas que les permitan avanzar profesionalmente.

✔ Gerentes eficaces:

Son quienes logran resultados reales en sus equipos y departamentos. Invierten:
  • 44% de su tiempo en comunicación
  • 26% en la gestión de recursos humanos
Son más valorados por sus colaboradores, logran metas y generan climas laborales saludables.

Reflexión: El éxito profesional no siempre es igual a eficacia. La administración ética y orientada a resultados sostenibles requiere un enfoque más humano y comprometido.

4. Reflexiones para futuros gerentes

Este enfoque de Luthans nos obliga a hacernos varias preguntas importantes:
  • ¿Queremos ser vistos como exitosos o como eficaces?
  • ¿Invertimos más tiempo en hacer política o en desarrollar personas?
  • ¿Estamos aprendiendo a comunicar con claridad, empatía y propósito?
  • ¿Qué tipo de legado queremos dejar como líderes?
La formación técnica es fundamental, pero no suficiente. Hoy se exige a los profesionales una inteligencia emocional avanzada, habilidades de liderazgo participativo, capacidad de escucha y construcción de confianza.

Un administrador eficaz no es solo quien sabe planificar y controlar, sino quien inspira, transforma y guía a otros en medio de la incertidumbre.

Veamos dos situaciones hipotéticas que ilustran la diferencia entre ser exitoso y ser eficaz:

Caso 1: El ascenso rápido
Carlos, gerente de una entidad financiera, logra un ascenso en menos de dos años. Asiste a todos los eventos sociales, tiene vínculos con directores clave y se asegura de ser visible. Sin embargo, su equipo presenta alta rotación y bajos resultados en satisfacción del cliente. ¿Es realmente un buen gerente?

Caso 2: El líder silencioso
Ana, en cambio, es gerente de una unidad de negocios mediana. No destaca por su presencia política, pero ha creado un equipo sólido, motivado y con alta productividad. Sus colaboradores valoran su liderazgo cercano y justo. No ha sido promovida rápidamente, pero sus resultados son consistentes. ¿Qué tipo de éxito importa más?

A modo de conclusión:
El trabajo de Fred Luthans sigue siendo profundamente relevante para quienes se forman en administración. Nos enseña que:
  • El comportamiento organizacional es un componente vital de la gestión moderna.
  • No basta con saber; hay que hacer y saber hacer con las personas.
  • La eficacia gerencial está más vinculada al liderazgo humano que a la política interna.
  • Un administrador eficaz se enfoca en comunicar bien, motivar a su equipo y resolver conflictos con inteligencia emocional.
Como futuros profesionales, el reto no es solo ser "buenos técnicos", sino convertirse en líderes íntegros, eficaces y humanos. Aquellos que logran combinar conocimiento con sabiduría práctica, ética profesional y empatía, serán los verdaderos agentes de transformación en las organizaciones.